domingo, 4 de noviembre de 2012

EL OTOÑO


HERFST - OTOÑO

El Otoño llegó. Se nota. Las hojas de los árboles empiezan a cambiar de color, de verde a amarillo de amarillo a rojo, algunas otras simplemente se caen. El viento se encarga de hacer limpieza, se las lleva o las cambia de lugar. Se ven alfombras de hojas en muchas calles, jardines y bosques.  Es un paisaje melancólico, metafórico y muy bonito.


En pleno otoño, la familia Piña Caviglia se alista para recibir el invierno. Todavía falta, pero las temperaturas ya están alrededor de los 6°C y no pasan de 10°C. Hay quien les dice que se preparen muy bien, que habrá nieve, temperaturas extremas, caos en el tráfico y transporte público. Otros más mesurados (realistas?) dicen que no es para tanto. Hará frío sí, pero nada de qué preocuparse.









Hace unas semanas recibieron la familia la visita del tío Ricardo. Diana y Alan lo disfrutaron mucho. Besos, abrazos, apapachos. Dónde está el tío? A dónde fue el tío? Quiero jugar con el tío. El tío paseó un poco y pareciera que también disfrutó de la compañía de la familia. El clima fue algo benévolo. Es cierto que algunos días llovió y el frío empezaba a asomarse, pero nunca obligó a cancelar ninguna visita y fue bastante soportable.

Hugo sigue trabajando y acostumbrándose a la cultura y compañeros. Durante el mes de noviembre hará algunos viajes, lo cual significa que Ana  
tendrá que lidiar con los pitufos (como les dicen a Diana y Alan) por su cuenta. 

Dicen que el que se va extraña menos, pero el papá de esta familia extraña mucho a sus hijos, aunque se vaya solo un par de días. Dice que cada que los deja de ver más de dos días los encuentra cambiados. Ana le dice que están igual. Los dos tienen razón.

Diana está cada vez más integrada en la escuela. Y poco a poco, el holandés se va haciendo presente en sus conversaciones. A veces son palabras, a veces son frases, incluso algunos pequeños diálogos con la vecina. Se le ve contenta, creciendo y aprendiendo.

Alan también aprende y crece. Imita a su hermana y los disgustos que le hace pasar a su mamá son cada vez más frecuentes.
- Alan termina tu comida. Alan bájate de la mesa. Alan deja de correr.
- Nei mama. Nei nei. Nei mamáaaaa!!!

El papá se rie, la mamá se enoja con Alan, pero también le sonríe al papá.

Yo diría, que están todos contentos y bien... por si tenían el pendiente.

6 comentarios:

  1. Así es, muchas gracias por abrirme las puertas de su hogar, gracias por el pastel de cumpleaños y todas sus atenciones durante mi estancia.
    Me sentí muy bienvenido y disfruté mucho de poder convivir con Diana y Álan, tienen unos niños maravillosos.
    El tío Ricardo

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  2. Pues para combatir el frío, aparte de ropa abrigadora, creo que en Holanda hay una bebida,tipo aguardiente hceha de papa que le llaman "agua de vida", pruébala y con gusto leeremos tus comentarios al respecto! Un abrazo a todos!
    Alfredo

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  3. Me da mucho gusto saber que la pasan tan bien, también para el frio un chocolatito caliente ayuda mucho. El tio está muy contento, pero como no, con tanto amor y atenciones recibidas.

    Un abrazo para todos
    Tere

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  4. La semana pasada cenamos con Ricardo y nos platicó de su viaje por allá, no entró al detalle de "nei mamaaaaaaa neiiiiiii" pero sí se le dibujaba una sonrisa en el rostro cuando se acordaba de sus sobrinos.

    Bueno saber que el proceso de adaptación sigue su curso...oye, y Navidad-Año Nuevo lo van a pasar por allá o por acá?

    Abraham

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  5. Gracias por tenernos al corriente de cómo se van adaptando a ese país. Nos alegramos mucho del progreso de Diana y Alan, así como de los padres... preparen los patines para el invierno, seguramente tendrán algún canal donde comenzar a practicar... Cariños para los cuatro. Magdalena y Jorge

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  6. Siempre interesante la visita al blog. Muchos saludos y abríguense bien!

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