Se acaba el 30 de abril y vivimos nuestro primer Día de la Reina. Beatriz, la reina actual, cumple años el 31 de enero, pero decidió que por honrar a su madre (Juliana), el Día de la Reina se celebraría el día de su cumpleaños, el 30 de abril. Esto además, permite un clima mucho más benévolo para las actividades al aire libre!
El día de hoy se caracteriza porque mucha gente sale a la calle a vender cualquier tipo de cosas usadas: zapatos, ropa, libros, juguetes, discos (L.P.), adornos, etc. Una venta de garage gigante. Hay gente en cada puente (que son muchos), en cada esquina, en cada parque. Se vende de todo, hasta máquinas de escribir. Nosotros conseguimos un rompecabezas, una pelota, una Barbie, un tren que se hace avión y unas pantuflas para Alan a muy buen precio.
Los niños, además de vender pan, jugo de naranja, limonada, sus juguetes y ropa usada, aprovechan para demostrar sus dotes artísticas, así que en los parques nos encontramos con bailarines de Thriller (Michael Jackson), cantantes, músicos con guitarra, violín, acordeón y hasta una pequeña bailaora de flamenco. Algunos realmente tienen talento, otros... a otros es bonito tomarles fotos!
El ambiente es muy bueno. Fiesta, risas, globos, banderines, música, color. Tuvimos suerte y en todo el día no llovió y la temperatura osciló entre 15 y 21 grados, ideal para salir a pasear (y la temperatura más alta desde que llegamos...)
Conforme avanza el día, y sobre todo en los canales, los puestos de venta y los niños empiezan a desaparecer y se hacen presentes los paseos en bote con música y alcohol incluidos. Realmente impresionante la cantidad de botes, gente, cerveza y cigarros de todo tipo, que navegan por la ciudad. Es imposible no hacer referencia a las trajineras de Xochimilco. No se parecen, pero sí se parecen. En esencia es lo mismo: una embarcación, navegando por canales, con gente comiendo, bebiendo y oyendo música. La embarcación, el paisaje, la comida, bebida y música sin embargo son diferentes.


Por las calles, música en cada esquina, mucha gente, comida, cerveza, vino blanco. Gente contenta, bailando, divirtiéndose, platicando, observando desde las ventanas. El color naranja predomina y en algunas esquinas el ambiente es el mismo de cualquier antro/boliche. En algún momento me encontré cargando a Diana, empujando gente, gente empujándome, el cabello de alguna chica con fuerte olor a cigarro en la cara, unos pasos más adelante el aliento a cerveza de varios holandeses y justo después, el inconfundible olor a marihuana... como en los viejos tiempos!
Conforme avanza la tarde, el ambiente empieza a "decaer". Menos familias, menos risas, menos color, más alcohol, más música, más gritos. Salimos a dar una vuelta alrededor de las 8:00 PM y nos encontramos con conatos de bronca entre borrachos, basura en las calles, gente tirada en la calle, vomitando, haciendo pipí sin usar los famosos baños públicos, un ambiente algo más pesado.
El día de hoy vi una ciudad diferente. No se parece a lo que había vivido. Pareciera que hoy se hacen a un lado todo el orden, seriedad, protocolo y estructura que había visto.
En general, una muy buena experiencia. Ambientes muy diferentes en la mañana y en la tarde, pero un día de fiesta digno de recordarse y vivirse!
Píquenle aquí para ver más fotos.
Abrazo!!
Llevamos ya 3 semanas en Ámsterdam y seguimos instalándonos.
Ya casi cerramos todos los trámites para registrarnos como residentes, ya tenemos cuenta en el banco, ya decidimos a qué escuela va a ir Diana, pero nos faltan muchas cosas más, entre ellas y probablemente la más importante, la casa.
La búsqueda y negociación ha resultado algo más complicada de lo que preveíamos, pero vamos avanzando. En cualquier caso, tenemos que tener algo decidido en una semana porque el próximo fin de semana tenemos que dejar el departamento en el que estamos sí o sí. Nos hemos enfrentado al eterno problema de que queremos algo bueno, bonito y barato... y una vez más compruebo que esa combinación, si existe, es muy difícil de encontrar.
Cambiando de tema, alguno de los primos me preguntaba sobre la comida por acá. Ya se imaginarán que las tortillas, el chile, incluso los frijoles, realmente no forman parte de la dieta diaria del holandés. Todo se puede conseguir, pero no en cualquier lugar y normalmente a precios muy altos.
En la oficina, lo normal es tomarse media hora para comer (en algún momento entre 12 y 1) algo muy sencillo. Un sándwich, una ensalada, algo de fruta, básicamente lo necesario para aguantar hasta la hora de la cena, que es la comida más importante. En el lunch, o nuestra hora de comida, los colegas holandeses suelen comer pan con queso o jamón, fruta, tal vez alguna sopa y todo eso acompañado de un frío y nutritivo vaso de leche!
La semana pasada me serví exactamente lo mismo que uno de mis compañeros. Mi lunch fue pan con mantequilla y pescado crudo, algo parecido a un sandwich de jamón, una mandarina y un vaso de leche. No estoy seguro de que lo vaya a repetir, aunque la verdad es que no estuvo mal.
La cena (entiendo que entre 6 y 7 pm) es la comida más importante. A diferencia del lunch, en la cena se sirve algo caliente, normalmente carne (de cualquier tipo) y lo más importante, muchas verduras. Sin duda, es una alimentación muy sana... aunque (por lo menos para mí) algo aburrida!
Mañana es 30 de abril y por acá se celebra el Día de la Reina. Es la fiesta más importante. Ese día, y solo ese día, se permite el comercio en las calles, lo cual quiere decir que toda la ciudad se convierte en una especie de venta de garage gigante. Los niños venden ropa, juguetes, limonada, dicen que hasta besos. Los adultos venden bicicletas, libros y cuanta cosa ya no les interese tener en su casa. Por lo pronto, por las calles ya se ven en las banquetas los espacios reservados, usando gis, cinta canela o algo para marcar los límites.
Además de la venta, habrá conciertos por todos lados, mucha cerveza y mucha gente vestida con algo color naranja, que es el color de la Casa Real (por eso también la famosa Naranja Mecánica, la selección de futbol), se ponen pelucas, se pintan la cara, andan con globos y banderas naranjas. TODO NARANJA!
Ya les contaré!!
Después de un par de sustos en sendos aeropuertos, llegamos sin problemas a Ámsterdam. En Monterrey fuimos los últimos en abordar porque nos descuidamos mientras desayunábamos. Fuimos los últimos en abordar, pero no pasó de una mirada desaprobatoria por parte del personal de la aerolínea.
En Houston fue más estresante. Desde el aterrizaje y hasta el despegue en Houston sólo teníamos 90 minutos. Aunque nos asignaron a una línea que en teoría tiene preferencia para viajeros que sólo están en tránsito, tardamos cerca de 45 minutos. ¡Sólo para el primer filtro! Después teníamos que pasar el filtro de seguridad (revisión de equipaje de mano, sacar computadoras, quitarse zapatos, etc.) Era justo un día antes de iniciar vacaciones de semana santa, así que había mucha, mucha, mucha gente. Nos formamos entre desesperados y resignados a perder el vuelo. Hacer esa fila nos iba a tomar por lo menos otros 40 minutos... ¡Y el vuelo salía como en 25! Pasamos al lado de un guardia de seguridad. Le expliqué que teníamos un vuelo que estaba por irse, que si podía ayudar... Le enseñé el pase de abordar, vio la hora... dudo por un segundo (que a mí se me hizo eterno) y finalmente nos abrió uno de los listones de la fila y nos ahorró como la mitad. Atrás de nosotros se amontonaron varios más... pero alcancé a escuchar que ya no podía ayudar a nadie... tuvimos suerte. Pasamos el filtro y nos fuimos corriendo a la sala E4. Cuando llegamos, ya estaba vacía. Nos acercamos al mostrador y justo cuando entregábamos los pases de abordar, por el altavoz del aeropuerto decían algo así como Last call for Ana Cristina Caviglia, Victor Hugo Pina Yeo, Diana Pina, etc... Nos vieron feo. Entramos. Asientos separados. Azafata con cara de "ni como ayudarlos". Pasajeros amables se movieron. Quedamos todos juntos.
Tomamos un taxi para ir del aeropuerto al departamento. Como a medio camino, nuestro marroquí chofer se topó con un control vehicular, aparentemente de rutina. La policía le pidió que se estacionara y luego le revisaron TODO. Sus papeles, que prendieran las luces, que prendieran las intermitentes, que funcionaran los limpia parabrisas, las llantas, el claxon. TODO. Cerca de 40 minutos esperando, pero todo en orden.
El departamento donde nos estamos quedando, temporalmente, está muy bonito. Justo enfrente de un canal, a 2 cuadras de la histórica casa de Ana Frank y a unas cuadras del Palacio de la Reina y de la, parece que famosa, Plaza Dam. La foto es la vista desde la sala.
Apenas llevamos 4 días en Ámsterdam. Hemos pasado los días más bien como turistas que como residentes. Todavía es muy pronto para formar una opinión o sacar conclusiones, pero aquí algunas de las cosas que en estas pocas horas de estancia más han llamado mi atención.
BICICLETAS.
Hay muchas bicicletas. Todo mundo anda en bicicleta. Bicicletas por todos lados. Hombres, mujeres, jóvenes, no tan jóvenes. En traje, en minifalda, en tacones. Hablando por celular, texteando, platicando, oyendo su iPod. Van rápido. Son muy buenos esquivando turistas distraídos. Todos los puentes para cruzar canales (que son muchos), todas las rejas de algún parque, cualquier tubo que esté por ahí, es estacionamiento. Además de los estacionamientos destinados ex-profeso. Enormes.
MALETAS.
Hay mucha gente en la calle con maletas. Si en Buenos Aires es común escuchar el ruido de una cochera avisando que está abriendo o en Monterrey es normal el olor a carne asada, aquí pareciera normal el ruido de las ruedas de maletas por toda la ciudad.
TRANSPORTE.
Está muy bien organizado. Lo más común para moverse, después de la bicicleta, es el Tranvía. Para subir y bajar hay que usar una tarjeta precargada. El saldo se debita una vez que se marca la salida. La tarjeta sirve para tranvía, metro y autobús.
BAÑOS PÚBLICOS.
Tal vez sea porque en la ciudad hay muchos hombres, con mucho frío y algunos bajo los diuréticos efectos del alcohol. Tal vez la razón sea otra. En cualquier caso, hay en algunas esquinas baños públicos para hombres. Eso no tiene nada de raro, pensaran algun@s. Lo que llama la atención es que estos baños no son lo que llamaríamos privados. Están al aire libre, cualquiera que pase por la calle puede ver al individuo en cuestión haciendo sus básicas necesidades. Va una foto a manera de ejemplo.
El clima ha sido más bien frío. Hemos estado entre 1°C y 12°C, pero hemos tenido suerte y hasta ahora no ha llovido gran cosa. Hasta nos han tocado un par de días con sol.
Mañana lunes recibimos la visita de Lucía, una de las hermanas de Ana y el martes (porque mañana es festivo) yo empiezo en la oficina.
Seguiremos en contacto...